Como me excita la idea de ser cornudo

Hola soy Manuel tengo 27 años hace 6 años conocí a mi actual esposa María que ya contaba con una niño de un hombre llamado Miguel. Siempre tuve la fantasía de que Miguel el ex de mi esposa se lo meta frente a mi así que lo planee todo bien mande al niño a la casa de sus abuelos y mientras mi mujer se bañaba y se tarda mucho mande un mensaje a Miguel para que venga urgente que se avía caído y no había nadie en la casa así que el apareció y entra a la casa y yo escondido en el ropero veo como entra y solo escucho un grito luego no escucho más nada. Después salen los dos ella como una poseída decia como había esperado un pene de verdad de nuevo ya que el de el de mi esposo solo tiene 12 cm y el de Miguel por mucho más grande y gruesa nunca había escuchado como disfrutaba con el desde ese día decidí ser cornudo porque me éxito ver a ella con otro y me gusta verla feliz como un niño con juguetes nuevos
 
Comienzo dándote mi mayor enhorabuena por haber realizado tu fantasía, aunque -a mi modesto entender- un poco rebuscada, para mí gusto.
No me imagino a mi marido "escondido en el ropero", viendo como otro hombre me da placer.
En mi caso me gusta sentir su mirada, contemplando como doy lo mejor de mí en una sesión de sexo salvaje en brazos de mí "macho" de turno, y saber que -asi- estoy haciendo feliz a mi marido.
Otra cosa que me permito decirte es que dejes de preocuparte por el "tamaño", ( una ancestral obsesión masculina )
El placer no está en el "tamaño", el placer está en el morbo de sentir que estoy siendo "adúltera" y lo hago con el beneplácito de mi esposo.
Solo espero que sigan adelante, ampliando el horizonte de vuestra sexualidad de pareja.
Recuerden que esa juventud maravillosa que tú y tu chica tienen, debe ser DISFRUTADA porque una vez que se termina ya nunca más regresa.
Y ustedes está en su mejor momento.
MEGA BESOS
M.A.R.I.A.N.A
 
Gracias la verdad al principio tenía miedo ahora me siento muy bien. La verdad es algo desesperado ya que lo estaba buscando ya hace tiempo y se nos dio bien ella esta muy feliz
 
La obsesión por el tamaño no tiene remedio en los hombres, y ahí está la obsesión por saber cómo es la del que se beneficia a su mujer. Sepas que medir las vergas no es una costumbre femenina pero entiendo que te emociona que ella te diga: la tiene el doble de gruesa que la tuya, uf.
 
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